Mireia y Uri son una pareja encantadora y muy romántica. Tanto es así que en nuestra primera reunión nos dijeron que querían casarse en la montaña, en el mismo lugar donde se prometieron. Una idea que por supuesto nos encantó! Y con esta premisa nos pusimos a trabajar en una boda íntima, romántica en un paraje inmejorable.
Mireia llevó un elegante vestido de Jesús Peiró con cuerpo de chantilly y sobre falda de seda. El complemento perfecto fue el ramo que ideamos para ella de rositas de pitiminí y tallo largo.
La ceremonia fue preciosa, en una acogedora ermita, a la que no faltaron ninguno de los amigos de la pareja, entre los que había un montón de invitadas super estilosas con sus vestidos coloridos y sus tocados. Como a nosotras nos gustan!
El aperitivo lo montamos al aire libre, y no le faltó de nada: los clásicos del jazz que tanto le gustan a Uri tocados en directo, Don Ostra sirviendo su delicioso manjar, gambas a la plancha y muucho más!
La comida estuvo llena de sorpresas y, para finalizar, un montón de horas de fiesta en las que lo dieron todo, con confetti incluido!
Esperamos que os haya gustado. Nosotras disfrutamos muchísimo organizándola!
Y si estáis pensando en que a vuestra boda no le falte de nada, ya sabéis! ;)
Fotos: Padilla & Rigau